Fue de nuevo a juicio y lo condenaron por el crimen de su bebé

Cristian Speid Torres, pagará 26 años de prisión, tras ser ser llevado nuevamente, a juicio por el asesinato de su hijo de tan solo tres años de edad y por el delito de maltrato al menor en perjuicio de su hija de 4 años de edad.

Los hechos ocurrieron en el año 2018, en la ciudad de Colón. Para ese entonces Speid Torres fue aprehendido. Meses después lo llevaron a juicio, sin embargo, fue absuelto de los delitos que le habían imputado.

Tras esta resolución la fiscalía de Colón presentó un recurso de anulación de sentencia, la cual fue admitida y esto generó un nuevo juicio contra el padre de los menores de edad, logrando la sentencia antes mencionada.

La Procuraduría General de la Nación estuvo representada por los fiscales José Leiva e Ivet Ramírez, quienes también lograron que el Tribunal de Juicio impusiera a Speid Torres la pena accesoria de 10 años de inhabilitación de la patria potestad, una vez cumplida la sanción principal.

Se pudo conocer que este hombre tenía conocimiento de que su pareja de nombre Estefani Torres Castillo, golpeaba constantemente a sus dos hijos, sin embargo, no hizo nada para evitar los abusos de los cuales los menores eran víctimas.

No fue hasta el 19 de marzo de 2018, que el pequeño de 3 años, quien llevaba el mismo nombre de su padre, Cristian Speid, fue llevado a urgencias del Hospital Manuel Amador Guerrero. Allí salieron a relucir los maltratos que sufrían ambos hermanos.

El pequeño por desgracia falleció producto de los golpes ocasionados por su madrastra, quien posteriormente, fue aprehendida y condenada a la pena de 34 años de prisión por homicidio doloso agravado y maltrato al menor.

Cuando esta mujer y su marido llevaron al bebé al hospital habían dicho que el niño se había caído en el baño de su residencia ubicada en el sector de El Vaticano, en la provincia de Colón, sin embargo, los golpes que presentaba el pequeño no concordaban con una caída.

Los familiares de Estefani la defendían a capa y espada diciendo que ella solo se dedicó a cuidar a los hijos de su pareja y aseguraban que no era una asesina.