coclé. Un verdadero terror fue lo que vivieron los familiares de un difunto en el cementerio de El Caño, en el distrito de Natá, el sábado.

El último adiós al fallecido transcurría con normalidad en el cementerio de El Caño de Natá, cuando, de repente, una gran cantidad de abejas africanizadas invadió el lugar. En cuestión de minutos, el camposanto quedó repleto de estos insectos.

El féretro quedó abandonado en el cementerio, ya que familiares, amigos y conocidos huyeron despavoridos, como fuegos artificiales en fiestas patronales, impulsados por el pánico, el dolor de la pérdida y las picaduras de las abejas.

Al lugar acudió el Cuerpo de Bomberos de la provincia para tratar de controlar la situación. Sin embargo, tomó un tiempo hasta que las abejas pudieron ser dispersadas.