Mundial Sub-17: Conozcan al chiricano que se adueñó de la portería panameña

Desde muy pequeño, las tardes soleadas en San Cristóbal, en la Ciudad de David, marcaron el inicio de una historia especial. Con apenas siete años, Adamir Aparicio solía ir a las canchas acompañado de su abuelo, quien con paciencia y cariño le enseñó a amar el deporte. Aquellos momentos despertaron en él una pasión que con el tiempo se convertiría en un sueño.

“La verdad es que cuando jugué el Nacional tenía 12 años y era mi primera vez jugando un torneo donde se viajaba a otra provincia y eso cambió mi manera de pensar y quería seguir jugando fuera de mi provincia y que se me diera la oportunidad de jugar en el extranjero, realmente el Torneo Nacional le cambia la forma de pensar a cualquier jugador”, fueron las palabras de Adamir.

Su primer paso formal en el fútbol llegó con la Academia Mario Méndez, en la que alimentó el deseo de convertirse algún día en un gran jugador.

El 17 de octubre de 2017 quedó grabado en su memoria. Ese día, cuando Panamá logró la histórica clasificación al Mundial de Rusia, algo cambió en su interior. Inspirado por su ídolo Jaime Penedo, decidió que quería seguir sus pasos y algún día custodiar el arco de la Selección Nacional.

No todo ha sido fácil. El esfuerzo por equilibrar los estudios con el fútbol le ha exigido sacrificios, incluyendo dejar a su familia a temprana edad para unirse a los entrenamientos de la Selección.

Sin embargo, lejos de verlo como un obstáculo, ha convertido cada reto en motivación, impulsado siempre por el deseo de cumplir sus metas y representar con orgullo a su país.

“Sentí muchos nervios y angustias la primera vez que me convocaron porque era mi primera vez y posteriormente fui acoplándome al grupo”, concluyó.