Ngäbes Buglé se cansaron de la inercia
- domingo 18 de septiembre de 2022 - 6:50 PM
En duros términos se expresó este domingo el joven dirigente de la comarca Ngäbe Buglé, Ricardo Miranda indicando que en Panamá hay más de cuatro millones y medio de panameños y siempre son los indígenas los que encabezan las luchas por las afectaciones que sufre el pueblo.
"Aquí hay más de cuatro millones de panameños esperando que baje la canasta básica, el combustible y los medicamentos, pero vienen los indígenas a apoyar para que baje eso, aunque la canasta básica siempre va a seguir siendo cara en la comarca porque es área de difícil acceso, acá [en la comarca], no hay medicamentos ni farmacias, entonces, ¿ qué hacen los cuatro millones y medio de panameños, por qué no salen ellos, por somos nosotros los que tenemos que poner el pecho?, preguntó el dirigente comarcal.
Miranda añade que, los mismos que son beneficiados con el combustible, le pasan el carro por encima a las personas y los líderes abandonan a las personas que están luchando a nombre de todos.
"Abandonan a su suerte a las personas que fueron atropelladas, ahí está el muchacho que atropellaron en Soloy, abandonado a su suerte, ahí no hay gremio de educadores, ni dirigente alguno para apoyar a la víctima, ha quedado solo y herido", reconoció Miranda.
Dijo que le causa asombro que el resto de panameños están viendo las noticias por televisión , esperando que ocurra un milagro.
"Bueno, sigan esperando, cuando el arroz cueste 5 dólares la libra, cómprenlo, ¿nosotros por qué tenemos que dejar de comer arroz nuevo acá en la comarca, para ir a cerrar calles para que otros vivan mejor que nosotros y después esos mismos son los que dicen que nosotros obstaculizados el desarrollo del país", contestó el dirigente Ngäbe.
Por su parte la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá le solicito al gobierno que evite que una minoría imponga su voluntad, generando el caos en un país que necesita caminar hacia hacia la reactivación económica.
La presidenta de este gremio empresarial sostiene que para poder avanzar hacia el desarrollo nacional de forma equitativa, el ambiente debe ser uno de participación constructiva y abierta, donde todos los actores aporten con un alto grado de respeto a los derechos de los demás, con el único objetivo de encontrar soluciones en beneficio de la población. Lo contrario es simplemente inaceptable.