Los Carnavales

II Parte
  • viernes 11 de marzo de 2022 - 12:00 AM

Existe entonces las pruebas irrefutable que los carnavales se llevaron a cabo en 11 de abril de 1669, al verificarse el recibimiento del nuevo gobernador Juan Pérez de Guzmán, Dávalos Ponce Santillana y Mesia. La discordia se produjo por la celebración se realizó en semana santa. La cual fue considerado como un acto de burla, máscaras y diversión en una semana considerada sagrada. Eran dos hechos controvertibles la celebración religiosa que cumplía 40 días. En contraposición con la fiesta pagana de las carnestolendas esta última estaba fuera del calendario de esta celebración.

Si el acto de las máscaras, música y bailes fuera un acto simplemente de fiesta también hay que agregar que toda la parafernalia constituía la actividad de sentar las bases del poder del gobernador en contraposición con el poder clerical. Lo pagano se mezcló con lo sagrado y de esa forma el gobernador Juan Pérez de Guzmán, Dávalos Ponce Santillana y Mesia, además de entrar triunfante a ocupar su puesto lograba hacer sentir su mando sobre las autoridades religiosas o catredalisias. Para esa fecha Panamá La Vieja contaba con 15,000 vecinos.

Diferencias entre los sectores de poder fue el reflejo de estos hechos, tal como ocurrió en la lucha entre los catedralicios, audiencia y los juaninos dedicados a cuidar los hospitales. En la cual debió intervenir el Rey, devolviéndole a los juaninos el poder de administrar los hospitales. Las carnestolendas continuaron y luego del ataque del pirata Morgan. El 28 de enero de 1671, por la fuerza ejercida por los invasores y sin contar con defensas adecuadas debido a que la ciudad no fue protegida por murallas o baluarte fue sometida, y el gobernador Guzmán ordenó explotar la casa donde se encontraba la pólvora causando en toda la ciudad un voraz incendio.

En 1673 el gobernador Antonio Fernández de Córdova funda a ocho kilómetros la nueva ciudad. Toda la tradición hispánica se traslada a la pequeña urbe. Las iglesias y la organización administrativa y las celebraciones religiosas también. El baile los paseos de los rabiblancos se mantiene e igual las tradiciones populares.

En esa sociedad colonial del paso de la sociedad post independencia las diferencias de clase se mantuvo y los esclavos siguieron siendo esclavos después del 10 y del 28 de noviembre de 1821. Ese sentir popular y tradición ancestral se mantuvo en la música y los cantos de los esclavos. O en el campesino expoliado por el terrateniente subsistió su tradición cultural. Así, estuvieron vivas durante largo tiempo proverbios, costumbre, leyendas, música y canto. Las carreras de caballos, lidias de toros y peleas de gallos se mantuvieron. Al igual que las carnestolendas todas esas manifestaciones cubrían la tradición colonial. Una sociedad dividida en clases los de intramuros y los del arrabal que lo dividía una muralla y una gran puerta de entrada.

Esta tradición recogida por dos extranjeras Gibbon y Scarlett escribió en sus (Relaciones de Viaje, p. 40) lo siguiente: "el bullicio incesante de los bailarines mulatos y negros de un cabaret vecino, me tiene medio despierto media noche. Puedo sentir como tiembla la casa cuando se mueve, no el ligero dedo fantástico, sino monótono sonido de una guitarra rajada y una dulzaina Esta diversión continúa casi sin interrupción.' Todo es rica y hermosa tradición la critico el prócer Mariano Arosemena de la siguiente manera: ‘Las noches precedentes a los días de San Juan i Santiago, en los meses de junio i julio, esa clase de diversiones se tenía más grande, constituyendo fiestas populares solemnes. Para las CARNESTOLENDAS, la diversión era grande. Los días de Pascua los espectadores de esos ACTOS RELIGIOSOS GRITABAN….Las procesiones de Semana Santa y Corpus Cristi eran motivos de desorden, en…los espectadores de esos actos religioso gritaban en voz en cuello.' (Apuntamientos Históricos. p.p. 38-39) Mariano Arosemena despreciaba las tradiciones folclóricas.

El intramuros los rabiblancos trazaba la línea de racismo. Mientras en el arrabal de Santa Ana nos menciona el Star Herald. Marzo 1859): En Santa Ana ‘El carnaval finalizó la noche con bailes y fandangos en Santa Ana, y procesiones de negros.' Los días de carnaval transcurrieron muy placenteros. Empapar…con totumas llenas de agua con tambores (Star Herad. Febrero 1874). El cambio se dio cuando los comerciantes antes reacios a los carnavales se percataron en 1910 que se podía convertir en negocio muy lucrativo, Con el tiempo suplantan a Domitila y Tiburcio. En la ciudad el tamborito no importa y la pollera y el montuno quizás tenga algo interesante. Lo autóctono es reemplazado por orquestas extranjeras, y que decir de los toldos ni hablar, solo en las tarimas aparece un POLICIA VESTIDO DE NEGRO CON UN FUSIL EN LA MANO. Nuestras tradiciones ahogadas por el cosmopolitismo enterrando con el Decreto 100 de 2012 la figura de los resbalosos cuya existencia data de hace más de 400 años. Eliminados por actitud sanitaria de profundo racismo y así, se continuará hasta borrar la memoria histórica.