Grupo se dedicaba a atacar a periodistas

Un nuevo escándalo sacude al Gobierno, luego de que ayer se denunciara públicamente la existencia de un call center dedicado a monitorear los medios de comunicación para desprestigiar a periodistas que criticaban la gestión del presidente Ricardo Martinelli.

Todo se dio a conocer cuando un hombre apareció en TVN , de espaldas y visitiendo un abrigo para reservar su identidad, reclamando el pago de servicios que estaba ofreciendo bajo la coordinación del exsecretario de Comunicación del Estado, Alfredo Prietto.

Una comunicación, vía correo electrónico, entre la persona y Prietto, revela que se trataría del profesor José Vargas Castellar, y así lo asumiría la Presidencia horas más tarde.

Vargas Castellar contó que él y un grupo de cinco personas trabajaban ad honórem y que Prietto les prometió pagarles los gastos, lo que a la fecha no ha cumplido.

Vargas señaló que no todos los funcionarios de la Presidencia sabían de la existencia de este grupo que se creó el 30 de agosto de 2010 bajo los términos y condiciones de Prietto y agregó que la actual vocera del Gobierno, Astrid Salazar, también les prometió que se les pagaría, pero les mintió porque el pago nunca se hizo efectivo.

Según Vargas Castellar, tuvo varios enfrentamientos con el periodista Álvaro Alvarado, cuando este criticaba al Gobierno.

‘MARTINELLI DIO LA ORDEN’

De acuerdo con Vargas, este grupo operaba desde la residencia de cada uno, de allí le chateaban a Martinelli, quien fue el que, presuntamente, dio la orden de formar el equipo.

Para el mediodía, Martinelli le estaba sacando el cuerpo al asunto. ‘Esto no tiene nada que ver con la Presidencia. Si esta persona estaba trabajando ad honórem, esto constituye una falta administrativa. Si no, pregúntenle al señor Prietto’, dijo el mandatario.

El presidente añadió que tiene comunicación con todas las personas y si alguien le dice que lo va a defender, no rechazará tal ofrecimiento.

Para la presidenta del Colegio Nacional de Periodistas (Conape), Grisel Bethancourt, esta denuncia es muy grave, pues son actos propios de estados retrógrados y autoritarios, en donde se violan las garantías constitucionales de los individuos, solo por disentir.

‘Rechazamos este tipo de actuaciones bajas y desmedidas de desprestigio en contra de periodistas’, sentenció.

El exdiputado Jerry Wilson, del Partido Revolucionario Democrático (PRD), deploró que personas allegadas al presidente se presten para estos actos.

‘Esta situación, que raya en lo delictivo, no se vivió ni siquiera en la época de la dictadura, por lo que las autoridades deben investigar’, dijo.

RESPONDEN A LAS ACUSACIONES

La Secretaría de Comunicación del Estado, mediante un comunicado de cuatro párrafos, negó que tuvieran un contrato o vínculo laboral con José Vargas, pues no existía ninguna constancia o documentos en la Presidencia que respalden la existencia del trabajo que él asegura que realizó.

‘Al señor José Vargas se le atendió ante una reclamación económica que hacía de 9 mil dólares por un supuesto trabajo que habría prestado, para lo cual se le manifestó que no se le podía pagar, ya que no existía ningún contrato ni ninguna constancia sobre lo que él planteaba’, indica la nota.

Se trató de contactar a Alfredo Prietto, pero no respondió a las llamadas y mensajes dejados en su teléfono celular.