Se ganaron su sustento endulzando a feligreses
- domingo 20 de abril de 2014 - 12:00 AM
Para el Jueves y Viernes Santo, familias artesanas del corregimiento de Querévalos, distrito de Alanje, en la provincia de Chiriquí, se prepararon con la elaboración de dulces, mermeladas, cocadas, suspiros, pepitas asadas, y el tradicional panecito.
Esta labor de preparación la inician con un mes de anticipación ya que la faena es larga y lleva su proceso, sobre todo, en la fabricación de panecitos.
Vertilda Carreño, residente en la comunidad de Querévalos, con 19 años de dedicarse a la preparación de dulces y panecitos, narró que todos los años, para la época de la Semana Santa, prepara 2 quintales de maíz para los panecitos, que le rinden 800 unidades, que son empacadas, en bandejas, vendidas a $1.25. Y los ofrecidos en bolsas a un dólar.
Juanita Yángüez, artesana con 15 años de experiencia, residente en el distrito de Alanje, explicó que son pocas las señoras que se dedican a la confección de diferentes clases de dulces y, sobre todo, del panecito, ya que hay que dedicarle tiempo y trabajo.
Agregó, que la receta de la fabricación de este producto del maíz, viene de generación en generación; la aprendió de su madre y que al principio fue difícil prepararlos. ‘Me salían mal, pero no hay que darse por vencida, tenemos que seguir hasta que se logren bien las cosas’, sostuvo.
Verónica Barrera, quien para estos dos días se dedica ayudar a su familia con las ventas de estos tradicionales dulces, comentó que el negocio este año estuvo un poco lento.
‘Recaudamos unos 700 dólares, una cantidad razonable en esta fecha’, comentó Barrera.