- sábado 25 de febrero de 2017 - 12:00 AM
El Señor está contigo y te sostiene
Por mucho que intentes hundir un corcho, ¡resulta imposible! Primero, el corcho es más ligero que el agua; segundo, es tan impermeable que, si se mantiene sumergido en agua durante un año, ¡sólo absorbe 0,1 mililitros! Y sucede que al igual que corcho, tu: ‘cuando pases por las aguas, cuando cruces los ríos, no te anegarán, porque el Señor estará contigo'. Aunque parezca que te hundes en el agua de los tropiezos al perseguir tus sueños, aunque te sumerjas en las ríos de los problemas cotidianos: ¡saldrás a flote nuevamente como el corcho!, ‘porque mayor es el que está en ti que el que está en el mundo'. Recuerda que ‘el Señor está sobre las muchas aguas', y te mantendrá a flote. ¡Créelo!, pues ‘ésta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe'. El propio Jesús nos advierte que ‘en el mundo tendremos aflicción, que pasaremos por las aguas', ¡inevitablemente!; pero, añade: ‘en mí tengan paz…confíen, Yo he vencido al mundo'. ¡Levántate!, ‘Él ha vencido' para que tú seas ‘más que vencedor', y aunque parezca que te hundes en las aguas de la soledad, la enfermedad, la necesidad, la quiebra, en fin, en los ríos del fracaso: saldrás a flote…como si fueras corcho. El Señor te hace flotar, ‘está contigo y te sostiene'. ¡Ánimo!