• viernes 15 de julio de 2022 - 9:35 AM

Estado caótico e indignación 

Las recientes acciones de presión social en las calles de Panamá reflejan la frustración ciudadana frente a la inequidad y la injusticia

La determinación de los pueblos se manifiesta frente al abuso y la injusticia de sus gobernantes, no obstante, en democracia, las autoridades electas por votación popular también son el reflejo de sus ciudadanos. Es un circulo vicioso que se expande y se hereda a las siguientes generaciones.

La deformación social tiene mucho que ver con la falta de educación y las expectativas acerca de lo que se percibe como bienestar. Las recientes acciones de presión social en las calles de Panamá, solo reflejan la frustración ciudadana y la impotencia, frente a la inequidad y la injusticia.

Un movimiento que comenzó por el sector docente, que luego se extendió a otros sectores productivos y sociales, desencadenó una ola de indignación nacional, que amenaza en convertirse en estallido social sin precedentes en las últimas tres décadas.

Dentro de todo el caos que se vive, resalta el alto nivel de civismo y la conciencia ciudadana de los problemas que enfrenta el pueblo panameño, quien supo determinar el momento justo para darse a respetar y poner en cintura a quienes se creyeron más vivos que el resto.

Es tal, el cinismo que desbordó en la clase política, que se atrevieron a brindar con uno de los más finos escoceses que se pueden comprar en el mercado nacional, pese a que el resto de los mortales que viven en este país, sufren para llegar a fin de mes.

Fueron esas muestras de desprecio, más el discurso descarado por parte del gobierno, sobre el enorme sacrificio de la población, mientras un grupito se acomodaba en una cúpula de privilegios, con todos sus allegados, para eviscerar a ciudadanos.

La destrucción de la economía en función al atraco, a través de medidas restrictivas, fue la clave para que se diera el festín, con banquete y open bar incluido, que fue financiado con la más grande deuda pública adquirida por una administración de gobierno, en tan solo 3 años de gestión.

Periodista