No te duermas y confía

En 3 de cada 10 accidentes de tránsito hay un conductor DORMIDO o cansado, según la OMS. Pero, en la conducción de tu vida, ¡qué bueno es saber que ‘jamás DUERME el que te cuida'! Sin embargo, humanamente, hay ocasiones que tenemos otra impresión, y concluimos que Dios se DURMIÓ, o por lo menos: no nos escucha, o nos ha olvidado. ¿Te ha pasado? ¡A mí, sí! Y los discípulos, que andaban de arriba pa' bajo con Jesús, también vivieron lo mismo, pues ‘mientras navegaban, (Jesús) se DURMIÓ', narra la Escritura. Es más: ‘—¡Maestro! —gritaron—, ¿no te importa que nos ahoguemos?' Y Jesús –que ‘estaba en la popa'– tomó la palabra: ‘—Hombres de poca fe —les contestó—, ¿por qué tienen tanto miedo? Entonces se levantó y reprendió a los vientos y a las olas, y todo quedó completamente tranquilo'. Ese Jesús, ‘es el mismo ayer, hoy y por los siglos'; por tanto, hoy saldremos a enfrentar las tormentas cotidianas, con la certeza de que, aunque los vientos soplen, si Cristo está en la barca, aun cuando esté en la parte posterior –en la popa– de nuestra barca: no hay nada que temer ¡Él no se DUERME y ‘no te deja ni te desampara'! ¡No te DUERMAS tú!, ni sueltes el timón de la nave de tu vida, y navega confiado –si y solo si Jesús está en tu barca–.

LUCAS 8:23 ‘…mientras navegaban, (Jesús) se DURMIÓ…'