- sábado 16 de julio de 2022 - 12:00 AM
Cuando la deshumanización se posesiona en el sistema de salud
El psicólogo es un hombre que surgió de las entrañas de un pueblo interiorano, rompió la barrera de la desigualdad y siempre se ha enfrentado a toda discriminación.
Le faltan pocos años para ser octogenario, en su largo recorrido ha dejado huellas de caridad, de hermandad, de sencillez y de humildad. Siempre se ha esforzado por el bien común. Su vida la ha dedicado a la educación.
A sus 75 años llegó su merecida jubilación y con ella una grave afectación a su salud. La lucha ya inició con las desventajas que tiene un adulto mayor del proletariado, que se enfrenta a una terrible enfermedad y a un sistema de salud deshumanizado.
El calvario incluye los altos costos de la atención médica que lo empujan a buscar ayuda en una institución médica estatal especializada en cáncer donde sufre el maltrato de los trabajadores de la salud, la insensibilidad de los especialistas, la selectividad y las influencias que dan prioridad a los pocos privilegiados con dinero.
Esta realidad que sufre el psicólogo lo hace palpar, en carne viva, que el sistema lo percibe como una mecánica desechable, carente de humanidad, sin capacidad de sentir y pensar.
El psicólogo es una víctima y es deber del estado asegurar el acceso de las personas a servicios esenciales de salud, garantizando una prestación médica de calidad y eficaz, así como de impulsar el mejoramiento de las condiciones de salud de la población que brinden medidas positivas para los grupos en situación de vulnerabilidad, entendiendo que los mayores deben gozar de un nivel reforzado de protección.
Pon atención a la historia ya que en algún momento de la vida habrá un psicólogo en tu familia.
PROFESOR EN UP