• viernes 30 de mayo de 2014 - 12:00 AM

Constituyente Panameñista-PRD

Delegados del panameñismo y del PRD que acuerdan mínimos de gobernabilidad ante pretensiones desestabilizadoras de Ricardo Martinelli

Delegados del panameñismo y del PRD que acuerdan mínimos de gobernabilidad ante pretensiones desestabilizadoras de Ricardo Martinelli se están reuniendo. Estos negociadores solo son diputados, sesgando lo abordado; sobre todo, porque ellos pertenecen a un sector del Estado percibido como corrupto. Una negociación entre dos colectivos, para lograr gobernabilidad, debe ser entre cuadros que tengan visión amplia porque el Estado es más que un sector.

Hoy, esos negociadores anuncian que uno de los ejes de las negociaciones es ir a una constituyente. En sus programas electorales ofertados, ambos colectivos propusieron una constituyente, pero producto de la jugarreta del pacto Mami de 2004, que la sociedad civil promovía una constituyente, para enfriar esta tendencia, Moscoso y Torrijos, hicieron una reforma en dos asambleas, la que terminaba y la que iniciaba. Y entre las reformas trataron de blindar al poder constituido, del que formaban parte ellos y los beneficiarios de sus ejercicios gubernamentales. Por nada querían que se instalara un poder constituyente, ese que se erige con todo el poder y es para fundar una nueva República, no reformar la existente.

Ya parece que se acerca una constituyente, pero qué constituyente? La que dice la Constitución de 1972? Es una situación a contrapelo de la lógica. Solo hay que ver que la supuesta constituyente paralela está contemplada en el Título XIII que se titula ‘Reforma de la Constitución’. Así, lo contenido en este título es para hacer una reforma y no una constituyente. Esas son las vivezas de dos gobernantes no demócratas.

Hoy, para salvar un proceso constituyente que los políticos tradicionales, por ignorancia o maledicencia, quieren trastocar, se debe producir un empoderamiento de la llamada sociedad civil y de los independientes que tímidamente han incursionado en definir el futuro de la sociedad en que viven y junto a miembros de partidos que realmente quieren el bien común, organizarse para lo que se hace inevitable: ir a una constituyente para alcanzar por fin la victoria del bien común.

* Exprecandidato presidencial