Un combate que se ha complicado

La cuadra del volante sigue a la ofensiva, insisten en su estrategia de sonar en el bolsillo a Pablo pueblo, que está al borde del nocaut, porque el costo de la vida está demasiado alto, en medio de una crisis económica que agobia a nuestra tierrita, desde la llegada del coronavirus.

Como lo venimos diciendo, al final del día la esquina de Pablo pueblo siempre paga los platos rotos. Esta situación debe cambiar, porque la afición ha soportado de pie el inclemente castigo por más de dos años, es hora de que vea la luz al final del túnel.

El alza del combustible, del pasaje, de los alimentos, entre otras cosas, tienen a muchos tambaleando porque sienten como si les hubiesen conectado un potente gancho al hígado.

Los tricolores tienen que hacer algo urgente para darle tranquilidad a la afición, que comenzó a subir su guardia y a realizar entrenamientos en las vías, para mostrar su malestar por lo que ocurre.

Esos bochornosos espectáculos de la semana pasada, con los terribles intercambios de golpes en la costa, nos dan una mala imagen en el exterior. Siempre deben privar los asaltos de estudio, el diálogo es la mejor solución.