Aún hay esperanza de parejitas en ‘Big Brother'
- sábado 03 de diciembre de 2016 - 12:00 AM
CONCURSO
Con un primer lugar esperado y un segundo y tercer puesto reveladores cerró la gala final de ‘Big Brother 2016', la cual se realizó en el Teatro Assa el pasado jueves.
Como ya es conocido, Katherine Sandoval se alzó con los $25 mil al recibir el 57.40% de los votos, mientras que Carlos Justavino obtuvo 30.60%, dejando a Alejandro Garrido con un 12%.
Pocas sorpresas
Justamente fue este resultado el que sorprendió a muchos, puesto que se pensó que la pelea por el primer lugar sería reñida entre la doctora y el arquitecto. La razón: a ambos se les calificó como los más pudientes del concurso.
Obviamente no podíamos dejar de cuestionar el bajo porcentaje con la familia Garrido. Gabriela, reina de Calle Abajo de Las Tablas 2015 y hermana de Alejandro, se limitó a decir: ‘La diferencia es que, cuando sabes algo con anticipación, tu manera de actuar es diferente, esa es toda mi respuesta'.
El beso del revuelo
Tras el incidente de violencia entre Ángel y ‘Kathy', en Panamá había mucha incertidumbre sobre si esta relación tenía esperanza de salir a flote una vez culminado el proyecto; sin embargo, todavía la hay.
Un video en el que ambos se dieron un fugaz beso en los labios como celebración del triunfo corrió como pólvora por las redes sociales.
La ganadora de la primera edición del programa se negó a hablar al respecto. ‘Sobre Ángel no diré nada', dijo tajantemente.
Asimismo, nos acercamos a Lourdes Amores de Sandoval, quien (orgullosa por el primer lugar de su hija) nos confesó lo difícil que fue para ella ser testigo de todo lo que pasó Katherine en Argentina.
Ese mismo sentimiento, asegura, le dio fuerzas para seguir en las actividades para salvar a la doctora junto con el voto del pueblo panameño. Este último, considera, fue el que tomó la decisión final.
‘He llorado mucho, esto ha sido muy difícil, pero ver a mi hija fortalecida me daba fuerzas a mi también', confesó.
¿Milka decía la verdad?
A su llegada, Alejandro tuvo una distinción con Milka y sacó de su bolsillo un objeto que le entregó, seguido de un fuerte abrazo. En cada oportunidad fuera del aire se les vio conversando juntos. Entonces, ¿hay o no hay ro- mance?
‘Milka es la persona que más quiero dentro de la casa, ella decía que yo era su amigo especial y, para mí, ella también es la amiga en especial. No tenemos que darle explicaciones a nadie, estamos aquí [en Panamá] y podemos disfrutar por más tiempo, solo Dios sabe', dijo el arquitecto.