A prueba de bombas

Mbappé y Hakimi amigos que se verán en las semifinales del Mundial
  • martes 13 de diciembre de 2022 - 12:00 AM

Durante meses fue el secreto mejor guardado del mundo del fútbol ¿Seguirá Kylian Mbappé en el PSG o se irá al Real Madrid? Nadie era capaz de contestar a la pregunta con argumentos. Cuando en mayo pasado el atacante anunció que se quedaba, todo el vestuario del equipo francés confesó que lo desconocía hasta el último momento.

¿Todo? No. Achraff Hakimi lo supo "unos días antes", según dijo el exjugador del Real Madrid, que puso así dimensión a la amistad que une al marroquí con el francés, cómplices en el PSG, rivales este miércoles por un puesto en la final del Mundial de Qatar.

Mbappé y Hakimi no son del mismo año aunque su nacimiento solo difiere en un mes, no son del mismo país, aunque comparten las mismas lenguas, no tienen la misma cultura, pero ambos disfrutan de las mismas aficiones.

El suyo fue un flechazo que surgió en el verano de 2021, cuando el marroquí llegó a la capital francesa procedente del Inter de Milán, convertido en uno de los fichajes estrella de aquella temporada.

El francés le adoptó desde el primer momento, fue su guía en los campos de entrenamiento de su nuevo club, su consejero en el vestuario, su ‘cicerone' en la ciudad.

Mbappé le ayudó a encontrar casa, le mostró los restaurantes de moda y le enseñó a adaptarse a una ciudad a la que otros, sin el mismo consejero, tardaron meses en encontrarle el sentido.

Hakimi y Mbappé hablaban español, el uno porque creció en Getafe, en las afueras de Madrid, el otro porque tiene la ambición de saberlo todo. Juntos recorrían París, jugaban a las consolas, acudían a los mismos espectáculos.

Ambos amigos bromean, se lanzan dardos verbales, de esos que no duelen porque llegan envueltos en amistad.

‘Aquí voy a jugar contra mi amigo, voy a tener que destruirle. Me va a romper el corazón hacerlo', dice Mbappé entre risas sobre el escenario del Mundial. ‘Le voy a destrozar', responde en el mismo tono de broma Hakimi.

Mañana, las bromas tomarán otro cariz. Mbappé será el encargado de romper el fortín marroquí por la banda izquierda donde su amigo Hakimi deberá aguantar el asedio. Saltarán chispas entre dos jugadores en un gran estado de forma, dos amigos que se habían fijado escribir la historia de sus países.