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Fidel Escobar saliendo de la iglesia de Santa Ana, después de la misa.
El defensa Fidel Escobar vivió el día más triste para cualquier persona
El día más triste para cualquier ser humano es cuando le toca despedir a su mamá, eso lo vivió ayer el defensa panameño Fidel Escobar, quien junto a su familia despidió a la señora Aminta Oderay Mendieta Ocampo de Escobar.
La misa, que duró una hora, se llevó a cabo en la iglesia de Santa Ana, donde Fidel se mostró sereno, pero en su mirada se podía leer el dolor de despedir a la persona que más lo apoyó hasta sus últimos días.
De allí el cuerpo fue trasladado al cementerio de Plaza Amador.
Llamó la atención que al funeral no asistió ningún jugador de la Selección Nacional de Fútbol, ni miembros de la Federación Panameña de Fútbol. El que si acompañó a su amigo fue Ricardo Buitrago.
La señora Aminta era hermana de la leyenda del fútbol panameño Víctor René Mendieta.
Escobar viajó desde Costa Rica, donde juega para el Deportivo Saprissa de la Primera División, para estar presente.