- martes 25 de marzo de 2014 - 12:00 AM
Maridsa Elena Quijada Morales salvó la vida de su pequeño hijo de dos años de ser atropellado, pero ella murió.
La mujer, de 28 años, caminaba con su hijo en brazos a orillas de la vía Interamericana cuando se percató de que un auto venía fuera de control. Su reacción fue lanzar al pequeño a un lado, pero ella no pudo esquivar el sedán.
Nacialceno Valdés, testigo del hecho, relató que cuando llegó al lugar el niño estaba llorando con un peluche en la mano y la mamá estaba tirada a varios metros de él.
El accidente ocurrió a la altura de San Antonio de Atalaya, en Veraguas, cuando el conductor del vehículo, que padece de epilepsia, presentó una crisis que lo hizo perder el control del automóvil.
Luego de atropellar a la mujer el vehículo chocó un árbol y terminó destruyendo los baños de una fonda que está a orillas de la calle.
Maridsa fue trasladada al Hospital Luis ‘Chicho’ Fábrega, donde murió producto de las lesiones y golpes que sufrió en el cuerpo.
En el sedán viajaban tres personas, quienes fueron auxiliadas por paramédicos del Cuerpo de Bomberos y dejadas en observación, con lesiones moderadas.
Amelia Guerra, propietaria de la fonda, comentó que sintieron un golpe fuerte y un ruido extraño, y al salir, vieron el auto bajo los escombros.
El jefe de Operaciones del Tránsito en Veraguas, mayor Ramsés Huertas, dijo que ya se iniciaron las investigaciones para determinar qué fue lo que realmente sucedió.