Le dieron piso en el nuevo Curundú

É l había salido de prisión hace cuatro meses. Tenía antecedentes criminales y enemigos que en el pasado lo habían amenazado de muerte.

La noche del martes, a eso de las 9:00 de la noche, las amenazas se hicieron realidad.

Un adolescente de 17 años acabó con la vida de Milciades Rodríguez Aparicio, de 42 años.

La víctima caminaba por la segunda etapa del Proyecto Curundú, muy cerca a la torre 22. Allí fue interceptado por su verdugo.

Según un testigo, el homicida le dijo: ‘Te acordabas de que nos la debías, ahora las tendrás que pagar’.

Aparentemente Rodríguez intentó dialogar con su atacante, pero el chico armado no quería escuchar comentarios y menos disculpas.

El testigo dijo que la conversación fue muy corta, porque el joven sacó su pistola y le disparó un par de balazos muy cerca de la cabeza. Posteriormente se echó a correr.

Trascendió que el hombre malherido logró caminar algunos metros hasta llegar a la torre 21, donde se recostó cerca de un basurero.

Pasaron algunos minutos hasta que llegó la ayuda. Rodríguez fue remitido en patrulla al Cuarto de Uregncia del Hospital Santo Tomás (HST), donde se le recluyó en la sala de operaciones apenas ingresó.

Minutos después sus familiares se apersonaron al centro médico.

Entre gritos y llantos le reclamaban a la Policía y a Dios por haber permitido que este hecho de sangre hubiese ocurrido.

La devastadora y mala noticia para la familia llegó minutos después: Milciades murió, confesó un médico.

APREHENSIÓN

Tras el hecho, la Policía Nacional (PN) montó un operativo en el sector, logrando capturar al agresor, quien luego de ser revisado se comprobó que mantenía varios expendientes en Fiscalía.

Este es el primer homicidio que se da en el Proyecto Curundú, desde que fue inaugurado en febrero de 2012.