Infidencias y confidencias del 29 de diciembre de 2025

  • 29/12/2026 00:00

Glosas de la realidad política y social de Panamá del 29 de diciembre de 2025 Y al que le cae el guante, que se lo aguante

Monumento. Lo que tomó de sorpresa a toda la comunidad nacional fue la demolición del monumento chino que estaba al otro lado del puente de las Américas. Todo se dio bajo la luz de la luna.

Monumento 2. La metida de pata fue abismal por parte de la alcaldesa del West. Molino de Viento salió a decir que fue una gran barbaridad. Este monumento tenía más de 20 años en el lugar y representaba los lazos culturales entre los dos países. Viene bajando correa.

Río revuelto. El que salió en reaccionar sobre la demolición fue el mismo Chalcalde de los desfiles, propone de construir otro monumento en la ciudad. Y también el Mochilero se estaba rasgando las vestiduras, igual que Jorgito el Ñame.

Metida de pata. Pregunta un comemono de dónde sacará la alcaldesa, que sigue sin mostrar arrepentimiento, el chenchén para levantar desde cero ese monumento si no tiene ni para arreglar los daños que hay en el municipio. Plof, plof.

Viene la vaina. Por la esquina del transporte se conoció la decisión de un juez de reabrir un montón de casos contra un travieso. Dicen que se nombró de forma irregular directivo del gremio como sucesor de Tomasito y lo mismo hizo con una central para llegar a Conato 2 de Julita y Aniano.

Nueva autopista. Para la people del West viene un nuevo corredor para agilizar el tráfico que a las horas pico se pone infernal. Lo que anda rodando es que no será gratuito como las otras de la “Provincia Dormitorio”.

Chirola. El que se quedará sin comer jamón ni pavo fue el mismo Nandito, el hombre de los subsidios y las becas; el juez negó el cambio de la medida cautelar y fijo la audiencia para el 15 de enero del 2026.

Pongan el pecho. Un jode paciencia habla que los alcaldes deben dar explicaciones sobre el papel de los municipios en la titulación de tierras. Hay leyendas urbanas que permiten una película de terror, donde siempre pierden la people de apie. Y las servidumbres, ni hablar.

Regaladera. Comentan en la vereda tropical que uno que se puso el traje de Santa fue el mandamás del ministerio Salubre, puso tarima y plena y comenzó a repartir los regalos, los clásicos televisores planos y electrodomésticos. El puede, puede.

Juega vivo. Dice un necio que el ministro de los Techos sigue callado ante las denuncias que altos funcionarios de la regional del West se están repartiendo entre familiares y amigos los apartamentos de la Ciudad Esperanza.

Bajo la lupa. Dicen que la cocotuda de la justicia comunitaria del Municipio de David, para salvar su pellejo en la auditoría que le viene bajando, piensa deshacerse de su propia hermana funcionaria para que no la saquen de la papa. Ni Judas se atrevió a tanto.