Productos desaparecidos

Desde hace un tiempo he notado que hay productos que han desaparecido de los supermercados y las grandes cadenas de farmacias, productos de toda la vida; chocolates como Baby Ruth que ahora es parte de Ferrero, Rolo de Hersheys y el Crunchies de Cadbury eran muy comunes en los dispensadores colocados al lado de las cajas registradoras. Esas distribuidoras mantienen presencia comercial en Panamá y traen otros chocolates en tableta que realmente no tienen gracia pero si son mucho más caros. Yo, que era adicta al chocolate, casi no consumo porque lo que hay no vale la pena, saben a plástico.

Hace años mi mamá compraba una mantequilla europea que venía en lata, al abrirla el delicioso olor a leche invadía toda la cocina o el comedor. La usamos por muchos años hasta que un día simplemente desapareció. Así mismo ha pasado con marcas de arroz pre cocido, enlatados españoles, hasta productos de marcas populares como Maggi que sacó del mercado su caldo casero para sofreír y condimentar. La línea de cuidado corporal St. Ives y su scrub de durazno a veces aparece. Productos que son exitosos como un líquido recoge polvo que fabricaba la empresa panameña SAR fue descontinuado por ellos mismos.

Cada vez que voy a comprar algo noto espacios vacíos que luego son rellenados y reemplazados por marcas desconocidas y de menor calidad.

Con los perfumes y el maquillaje pasa igual, porque Panamá ya no ofrece variedad, calidad ni precios competitivos y es por eso que hace rato no vemos los buses que venían de Centroamérica con compradores decembrinos. Triste.