Parafernalia militar
- 07/11/2025 00:00
Con paso firme, lema del gobierno, las Fiestas Patrias nos trajeron la visión de hacia dónde vamos en cuanto a una articulación del gobierno. Una articulación definitoria en el poder público. Los cuerpos armados.
Por años, desde el gobierno de Martín Torrijos, los estamentos de la Fuerza Pública, han ido asumiendo beligerancia en la vida de la nación. Como buen PRD, que pelecharon del militarismo exacerbado en los 21 años de dictadura, ese gobierno no manifestó recato civilista y militarizó el Servicio Aéreo y el Servicio Marítimo Nacional y conformó un ente militar, El Servicio Aéreo Naval (Senan) y organizó el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront). No bastándole con esto, el Servicio de Protección Institucional (SPI), también lo militarizaron. Hoy día, hasta el Servicio Nacional de Migración lo han militarizado. Creo que la Policía es la menos militarizada, pero goza de las prebendas de todos estos cuerpos, con leyes especiales que más parecen soborno para tratar de alejarle intenciones golpistas a la oficialidad de estos estamentos.
En 1968 la Guardia Nacional apenas llegaba a 5mil miembros y con alta oficialidad de tenientes coroneles y coroneles de no más de 15 en el final de la dictadura. Hoy la Fuerza Pública tiene en los rangos equivalentes (subcomisionados y comisionados) alrededor de 400 con un pie de fuerza algo más de 28mil miembros. Comparemos: la oficialidad alta de ahora es 30 veces la de antes, cuando los miembros de hoy no son 6 veces los de antes. Para qué tanto cacique si no tienen tanta tropa? Otro número: la población de hoy es apenas 3 veces la del golpe de 1968.
Y para intimidar, los desfiles en los últimos tiempos han sacado toda la parafernalia militar. Tropas en arreos de combate, con equipos de primera, mientras que para otras ramas del gobierno no hay presupuesto, para los milicos no hay restricciones.
Cada gobierno que ha pasado ha mimado a los milicos. Cría cuervos y te sacarán los ojos. No van a detenerlos las caricias.
Estamos caminando con paso firme hacia otro golpe, so pretexto de corregir el país, ante el descontento popular por la degradación y corrupción del sistema político.
Amanecerá y veremos...