Panamá y el corazón del PRD

  • 26/10/2025 00:00

Durante más de veinte días de octubre 2025 recorrimos las entrañas de nuestro país y el corazón de nuestro partido. Fue una gira de reencuentro con nuestras raíces, con nuestra historia y con las fuerzas vivas de nuestra dirigencia. En cada provincia, distrito y corregimiento, el PRD volvió a respirar esperanza, compromiso y orgullo.

Compartimos con más 90 por ciento de los 300 miembros del Directorio Nacional, órgano rector del partido, elegidos por más de 4,200 delegados del Congreso Nacional, junto a los 10 miembros del Comité Ejecutivo Nacional. Con ellos conversamos sobre cómo alinear visiones, fortalecer la unidad y renovar el compromiso con los ideales que dieron origen a nuestra organización.

En cada encuentro hubo diálogo franco, reflexión profunda y la convicción de que el PRD sigue siendo más que una estructura política, es un sentimiento nacional. No se trata de buscar cargos o posiciones, sino de rescatar el alma del partido desde sus bases, desde los barrios, las comarcas, los corregimientos, donde realmente vive la esperanza.

Dirigir un partido como el nuestro no es administrar una maquinaria; es escuchar, sentir y actuar; es conectar con los profesionales, servidores públicos, productores, mujeres trabajadoras, jóvenes soñadores y familias que creen en la justicia social.

Tras la derrota del 5 de mayo de 2025, algunos pudieron rendirse, pero lo que hemos visto demuestra lo contrario; existe fuerza, vocación y propósito. Este Directorio Nacional no es solo un espacio de crítica y autocrítica, sino un punto de partida; aquí germina la unidad que necesitamos, una unidad que respete la diferencia, que abrace la crítica, que se sostenga en el diálogo y se proyecte con esperanza. Este Directorio representa la voluntad de reconstruir con humildad, aprender de los errores y unir fuerzas para servir mejor.

Porque solo desde la unidad consciente y la acción comprometida podremos honrar nuestra historia y responder al futuro que la patria reclama.

Hay que reafirmar nuestro compromiso colectivo: caminar juntos, reaprender juntos y construir juntos; porque el PRD nació en las entrañas de nuestra gente y seguirá transformando la historia de Panamá.

Dirigir un partido como el nuestro no es administrar una maquinaria; es escuchar, sentir y actuar.