El Nobel de María Corina y nosotros

La respetable y prestigiosa Academia de los Nobel, le ha concedido a la valiente venezolana María Corina Machado el premio Nobel de la Paz. Sorpresa para nuestro mundo político, para los Demócratas y Civilistas que luchan en el mundo con toda clase de limitaciones y muchas veces con el silencio cómplices de los ciudadanos y países que dictan cátedra de progreso y democracia.

El Premio a Corina es un premio a todas las mujeres que con valentía se enfrenten a los regímenes totalitarios. Es un premio a la terquedad de los pocos contra las tiranías religiosas e ideológicas. Es un premio para la esperanza de los pueblos que luchan muchas veces en silencio frente a la sociedad global, egoísta y cobarde.

Corina y el Nobel es un premio a la resistencia democrática y pacífica de los venezolanos de adentro y de afuera que esperan el retorno a la tierra que los vio nacer y donde están las raíces de sus padres y abuelos.

Me uno a la alegría de los demócratas y civilistas del mundo y a los venezolanos que resisten adentro y afuera de su patria.

A Corina merecido homenaje. Ojalá muchas otras mujeres de nuestra América sigan su ejemplo Cívico y Democrático.

Estoy seguro de que los panameños civilistas y democráticos nos alegramos, en especial, los que ya vivimos la trágica experiencia de la dictadura militar, la represión, los exilios, la masacre de Albrook y la intervención militar de 1989 con la tragedia de muertos, heridos, desaparecidos y saqueos.

Venezuela fue generosa con los panameños. Rómulo Bethancour, Rafael Caldera, Luis Herrera Campins, Carlos Andrés Pérez, solidarios con nuestra causa canalera.Hacemos votos para que pronto recuperan su libertad, su democracia y su futuro de prosperidad. Igualmente, hacemos votos por el retorno de los hermanos venezolanos a su tierra generosa y rica.

¡Viva Corina y viva Venezuela, la tierra del Libertador!