El regreso de las tortugas

  • 28/12/2025 00:00

Un relato que enseña la importancia de cuidar el medio ambiente y que muestra que, con esfuerzo colectivo, constancia y amor por los recuerdos, es posible recuperar y proteger lo que parecía perdido

Recuerdo con nostalgia y melancolía los veranos de mi infancia, cuando mis padres me llevaban a esta playa.

Recuerdo construir castillos de arena con mi hermano, jugar voleibol con mi padre, chapotear en las olas con mi madre o acampar bajo el cielo estrellado. Incluso recuerdo aquella vez en que vimos a las tortugas salir de la arena para dirigirse al mar.

No puedo evitar soltar una lágrima al saber que todos esos recuerdos quedaron sepultados por años de contaminación.

Por culpa de las montañas de plásticos, latas y electrodomésticos mal desechados, la playa que soñaba visitar cada verano está contaminada... Pero no me permito lamentarme cuando hay trabajo que hacer.

He venido aquí a devolverle a esta playa su época dorada. Junto a muchos voluntarios, hemos llegado con el mismo propósito: lograr que las tortugas que nacieron aquí regresen.

Llegábamos poco después del amanecer, justo cuando el sol apenas se asomaba en el horizonte.

Bolsa tras bolsa llena, nos acercábamos más a la meta.

Esto no era para todos. La mitad del equipo se retiraba poco antes del mediodía, huyendo del sol abrasador; otros, más osados como yo, nos cubríamos con abundante bloqueador para seguir la jornada.

Cuando el ocaso llegaba, quedábamos solo unos pocos, pero con la ardiente convicción de lograrlo.

Fueron días de mucho sudor bajo el sol, y otros de jornadas canceladas por la lluvia. No esperaba menos al haber aceptado este reto, pero, después de tanto, nuestro esfuerzo ha valido la pena...

Ahora me siento en la arena, aún algo caliente por el día soleado, dejando mi cabello suelto a merced de la brisa marina. Con la luna alzada en el cielo, sonrío al ver a unas tortugas salir del mar.