Premundial U23: El béisbol es el rey de los panameños

La Selección Nacional U23 ha despertado ese orgullo que por décadas ha sentido el panameño cada vez que habla de béisbol, ese que se juega desde un potrero, hasta el escenario impresionante de las Grandes Ligas. Se coronaron campeones del Premundial de su categoría después de un gran trabajo en el torneo, jugado en el estadio Mariano Rivera de La Chorrera. Panamá venció a Puerto Rico 4-1 para mandar en su territorio.

Adriel González trabajó una joya de pitcheo, cubriendo la ruta completa de siete entradas, permitiendo una carrera, boleando a tres y ponchando a siete, para ser el ganador del partido. Perdió el relevista Byron Madero.

Panamá hizo daño con una carrera en la baja de la cuarta entrada y logró anotar tres más en la baja de la quinta, suficientes para sentenciar el partido con 10 hits y sin errores.

Los mejores al bate por Panamá fueron: Héctor Rayo de 3-1 con un remolque, Edwin Hidalgo de 3-2 con dos anotadas, Eduardo Tait de 4-1, Eduardo Vaughan de 3-1 y Adrián Sugastey de 4-1.

Reacciones

Uno de los más felices era el técnico Aníbal Reluz, quien había estado alejado del béisbol los últimos años, aceptó el reto y cumplió

“Yo no sé si me dieron este equipo a mí para matarme o qué, pero yo le dije al presidente, cuando me anunció que me lo iba a dar, nosotros vamos a clasificar y vamos a pelear el campeonato, lo único que queremos es que nos de la facilidad de cómo practicar a un equipo”, sostuvo tras el triunfo.

Por su parte, Adriel González brilló desde el montículo, en el partido de su vida y por su patria. Estaba fuera de acción hace dos años por una cirugía, Tommy Jhon, el formaba parte de los Atléticos de Oakland.

“Es un momento muy especial, lanzar una final, primera vez que lanzo aquí en Panamá y se siente lindo también, vengo de una Tommy Jhon, dos años sin jugar, y regresar con victoria y haciendo el trabajo que es, me siento feliz, porque yo solo sé el proceso que pasé y nada, esto es alegría”, dijo.

Y un prospecto que aportó mucho a la ofensiva, bateando .400 fue el receptor de los Gigantes de San Francisco, Adrián Sugastey.

“Gracias a Dios se pudo lograr el objetivo y no solo nosotros, sino los 24 jugadores”.

Tuvo que hacer el ajuste rápido a la hora de ir a batear.

“Desde que llegué intenté hacer el ajuste de esperar la bola y siento que me ayudó bastante y gracias a Dios pude hacer el trabajo.”, explicó el orgullo de la 24 de Diciembre.

Panamá ahora tendrá que prepararse para ver acción en el Mundial 2026, a jugarse en Managua, Nicaragua, del 6-15 de noviembre.