Colón suma 50 homicidios en 2025, la violencia no cesa

La noche del domingo 15 y la madrugada del lunes 16 de junio estuvieron marcadas por el terror en la provincia de Colón. Dos personas perdieron la vida y al menos tres resultaron heridas en distintos ataques armados ocurridos en el corregimiento de Cristóbal Este, en lo que se perfila como un nuevo episodio sangriento en esta región golpeada por el crimen.

El primer hecho violento se registró en la comunidad de La Medalla Milagrosa, sector de El Éxodo, donde el joven Erick Joel Villarreta, de 19 años, fue brutalmente acribillado.

Según reportes policiales, varios sujetos le dispararon en múltiples ocasiones.

Villarreta fue trasladado de urgencia por una patrulla de la Policía Nacional al Complejo Hospitalario Dr. Manuel Amador Guerrero, donde se confirmó su muerte. Médicos detallaron que recibió más de 20 impactos de bala en el cuerpo.

Horas después, la violencia volvió a encenderse en el sector 2-2 de Puerto Escondido. Sujetos armados descendieron de un taxi y dispararon contra un grupo de personas que se encontraban reunidas en la vía.

Tras el ataque, huyeron en el mismo vehículo, el cual colisionó más adelante con otro automóvil durante su escape.

El saldo de este ataque fue devastador: Alexis Iván Scott, de 20 años, falleció tras ser herido de bala; mientras que Héctor Luis Chifundo, de 27 años, y Emanuel Ariel Hernández, de 22, fueron trasladados con lesiones al hospital.

Ambos sobrevivieron al atentado, aunque uno de ellos se encuentra en condición delicada.

Además, el domingo fue encontrado sin vida un hombre de avanzada edad en una parada de buses de un centro comercial, en la ciudad de Colón.

El cuerpo, recostado en el asiento, fue hallado por transeúntes y su muerte aún no ha sido esclarecida.

Las autoridades se presentaron al lugar y han iniciado las investigaciones correspondientes para determinar las causas de su fallecimiento.

Con estos hechos, la cifra de homicidios en la provincia de Colón asciende a 50 en lo que va de 2025, manteniendo en alerta a las autoridades y a la ciudadanía.

La violencia no da tregua, y la comunidad exige respuestas ante el desbordamiento de la criminalidad.