Colón: Mató a su ex suegro a puñaladas
- 13/07/2025 00:00
La violencia no da tregua en la provincia de Colón. Entre la tarde y noche del viernes 11 de julio se registraron dos nuevos homicidios, cerrando una semana sangrienta en la que al menos siete personas fueron asesinadas en distintos sectores de la región.
Con estas nuevas víctimas, la cifra total de homicidios en la provincia asciende a 71 en lo que va del 2025, según las cifras extraoficiales que maneja El Siglo.
El primer crimen ocurrió en el sector de Villa Cartagena, corregimiento de Puerto Pilón, donde Ibrahim González irrumpió en la residencia de su expareja, Yashany Ramírez, de 24 años, con un arma blanca.
Según testigos, intentaba agredirla, pero fue interceptado por Federico Ramírez, de 62 años, padre de la mujer, quien terminó siendo apuñalado en múltiples ocasiones y murió en el lugar.
La mujer también resultó herida en el rostro, tórax y en la pierna derecha, mientras que el agresor se dio a la fuga.
Horas después, en el sector de El Límite en Cativá, Jorge Martínez, alias ‘Zanahoria’, de 30 años, fue asesinado a balazos en una vereda. Murió en el sitio antes de que pudiera recibir atención médica.
Estos dos hechos violentos se suman a una serie de homicidios cometidos desde el martes 8 de julio. Ese día, se registraron tres crímenes. Ameth González, de apenas 17 años, fue asesinado a tiros en La Pólvora, corregimiento de Cativá.
Más tarde, Ariel Bready Arango, de 28 años, murió tras recibir disparos en la cabeza cerca de la torre H-159 en Altos de Los Lagos, corregimiento de Cristóbal Este. Horas después, César Becker, de 40 años, fue acribillado en la calle principal de San Judas, también en Cativá.
La violencia continuó el miércoles 9 de julio con el asesinato de Joel García Prosper, de 38 años, dentro de un edificio en Calle 3, entre avenida Bolívar y Herrera.
El jueves 10 de julio, Julián Segura, de 37 años, fue interceptado y baleado frente a su residencia en el sector de Medalla Milagrosa, en Cristóbal Este.
Según su esposa, los atacantes lo sorprendieron cuando salía camino a una tienda. De acuerdo a las autoridades, Segura ya había sido aprehendido en enero por violencia familiar, tenía una boleta de conducción desde marzo y había sido herido con arma blanca en un hecho previo en la misma zona.
Hasta el momento, no se reportan detenciones por ninguno de estos crímenes. Las autoridades de la Dirección de Investigación Judicial y la Fiscalía de Homicidios de Colón mantienen abiertas múltiples investigaciones para dar con los responsables, mientras la comunidad sigue exigiendo mayor presencia policial y acciones concretas para frenar la creciente inseguridad.