Panamá
Entre el 2017 y 2018 se han contabilizado 1,313 personas afectadas
INVESTIGACIÓN
Es un reto para Panamá eliminar la enfermedad de la malaria, pero lo cierto es que en los últimos 18 años se han reportado un total de 23,951 casos. Esto comprende desde el año 2001 hasta el 2018.
El año en que más se reportaron casos de este padecimiento fue en el 2004 cuando se contabilizaron cuatro mil 213. Ya desde el 2008 para acá, se ha mantenido entre 550 a 800. Los lugares más afectados son las áreas comarcales, Darién y Calovébora, en Veraguas.
Nicanor Obaldía III, miembro del Sistema Nacional de Investigación de Panamá e investigador senior en salud del Departamento de Investigaciones en Parasitología del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (ICGES), manifestó que el Gobierno y el Ministerio de Salud han decidido llegar a la meta que, para el 2020, se elimine esta enfermedad.
Dijo que para lograrlo tienen que examinar la genética del parásito y que, a través de los estudios que se han realizado, ‘hemos demostrado que el parásito se encuentra en una fase clonal, lo cual significa que, de los más de 600 casos que quedan por año, ya prácticamente se está convirtiendo en el mismo parásito genéticamente, es decir se está entrecruzando'.
Agregó que ‘hemos demostrado también que el problema es multifactorial, no es solamente ir a los lugares donde ocurren los casos sino, aparentemente, hay otros factores a nivel biológico, nuevos descubrimientos que hemos hecho aquí en Panamá en colaboración con grupos internacionales que indican que hay un reservorio del parásito en el ser humano que no se ha identificado, sino hasta ahora que se ha publicado un artículo que hemos hecho, en el que intervienen otros elementos, otros órganos, por ejemplo siendo la médula ósea un reservorio que no se había estudiado antes. No sabemos si puede ser un reservorio para perpetuar la infección a través del individuo y de la población'.
Por su parte, la investigadora Lorena Coronado, dijo que las drogas que se usan actualmente para el tratamiento del parásito genera resistencia, ese es un problema bien grande a nivel mundial. ‘Las vacunas también han sido un problema, porque son distintas dependiendo de la cepa del parásito, en vista de esta situación es necesario buscar nuevas alternativas para tratar la malaria sin utilizar drogas, es allí cuando entra nuestro proyecto que es el uso de microondas de energía electromagnética para tratar de afectar selectivamente al parásito de la malaria, sin afectar las células de las que no están infectadas y hemos visto de que es viable', detalló.
Jorge A. Motta, director de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), indicó que ‘nos hemos dado cuenta de que el modelo antiguo, donde creíamos que se escondía el parásito de la malaria ya no es cierto, ahora se ha demostrado que se esconde también en los huesos'.
La malaria es una enfermedad causada por parásitos del género Plasmodium. Estos se transmiten al ser humano por la picadura de mosquitos anófeles infectados.