Panamá
El autor de la columna quincenal, Mariano Mena.
El autor es el exdirigente sindical Mariano Mena
OPINIÓN
El domingo recién pasado amanecimos con la noticia de que el innombrable de El Renacer había armado una pataleta, vertiendo improperios, amenazas y cuanto se le ocurría a los custodios de ese centro penitenciario.
Frente a lo sucedido, hay que recordar que las personas privadas de libertad tienen una serie de restricciones que le son comunes al resto de los ciudadanos, y parece ser que este señor se resiste a acatar, sospecho que debido a que cree que el país es su finca y los demás mortales sus súbditos o empleados.
¿Qué parte de ser un reo el innombrable no ha entendido? a pesar de tener una serie de privilegios del que no gozan el resto de los privados de libertad en todo el país, este señor sigue creyendo que por ser él puede hacer lo que le da la gana cuando y como le parece; no señor.
Por algo usted está detenido en medio de cuatro paredes, y no es por ser santo, no señor usted está ahí porque algún delito ha cometido, por tanto debe cumplir con los mínimos exigidos al resto de los privados y sin ningún tipo de contemplación puesto que no tiene corona, allá donde los fulos ni chistaba cuando lo llevaban a las audiencias o salía de ellas, caso contrario, acá grita, se opone a ser conducido para que los custodios o policías lo lleven a la machimberra y tener excusa para presentar recursos dilatorios, exige derechos que no le están permitidos a otros reos como el derecho al voto en las primarias partidarias y después viene con el cuentito de que se le subió la presión, claro con esos desbarajustes ¿a quien no?
Frente a todas estas artimañas y desmanes el juez de garantías, licenciado Jerónimo Mejía, tendrá que ir poniendo orden, puesto que al comparecer a las audiencias o al salir de ellas grita, pataletea, se hace empujar, irrespeta a los uniformados y nadie le hace ni le dice nada, está como acostumbradito y que nada le pase.
El sistema penitenciario no puede permitir que un reo, y menos un expresidente, promueva este tipo de acciones al interior del penal, porque al permitirlo todos los naipes se vienen abajo y las consecuencias serán incalculables, por tanto aplaudo las medidas disciplinarias que le han impuesto y la próxima que lo manden, vía expresa para Punta Coco, él lo que tiene que hacer es dar ejemplos de buena conducta y regenerarse en vez de comportarse como un vulgar maleante aunque lo sea.
Exsecretario general de la CGTP.