Panamá
En 2013 se esperaba que Panamá estuviera en la fase de eliminar la infección
MALARIA
Las costumbres y ritos propios de las poblaciones indígenas son los principales factores que inciden en el aumento de los casos de malaria.
De acuerdo con el director general de Salud, Carlos Gálvez, la erradicación de esta enfermedad ha sido difícil, pues el personal del Ministerio de Salud (MINSA) no puede ingresar a estas áreas hasta que los nativos finalicen sus ceremonias, que muchas veces pueden durar hasta una semana.
Esta situación ocurre en la Comarca Guna de Madugandí, en Chepo y Darién, y en Guna Yala donde los índices de malaria son altos.
Investigaciones del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (ICGES) indican que para el 2011 Panamá se encontraba en una fase de disminución de los casos de malaria. En el 2013, según el estudio, se esperaba estar en una fase de eliminación.
Sin embargo, los 559 casos contabilizados hasta el pasado 21 de junio dan cuenta de que esta meta está difícil de lograr a corto plazo.
‘Cuando el personal logra ingresar al área los casos de malaria han proliferado’, expresó Gálvez, quien señaló que los nativos muestran poco interés por terminar el tratamiento que les ordenan los médicos una vez les detectan la enfermedad que transmite el mosquito anofeles.
Según Gálvez, al tercer día de tratamiento cuando la persona empieza a sentir mejoría lo suspende. Esto provoca que se dé una recaída en la persona y peor aún, lo convierte en un candidato a que un mosquito lo pique y siga propagando el virus a otras personas.
La proliferación del mosquito anofeles, transmisor del parásito plasmodium de la malaria, también es otro problema, pues los grupos indígenas tienden a acumular agua en recipientes y vivir cerca de las riberas de los ríos.
En el 2013 para este mismo periodo el número de personas afectadas alcanzaban los 365.
Esto significa que en lo que va del 2014 hay un aumento de 194 afectados por esta enfermedad.
Problema de viaja data
El exministro de Salud, Fernando Gracia, dijo que durante su administración (1999-2004) el principal problema para controlar la malaria era el ingreso del personal de salud a las áreas comarcales.
‘Teníamos que contar con la aprobación del cacique para llegar a la comunidad y medicar a los pacientes’, manifestó Gracia.
Gracia considera que la limitación se mantiene y no ha cambiado, a pesar del apoyo del personal.