15,400
varones y 895 mujeres están recluidos en las cárceles del país.
Panamá
A nivel nacional hay 7,918 personas privadas de libertad condenadas, según el Sistema Penitenciario.
El Minsa asegura que les ofrece el tratamiento antirretroviral
PREVENCIÓN
El Ministerio de Salud (Minsa), hasta diciembre del año pasado, registraba 154 reos portadores del Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) o en la etapa de la enfermedad en los centros penitenciarios.
Aunque la entidad no especifica cuántos tienen la enfermedad y cuántos son portadores del virus, detalló que 142 son varones y 12 mujeres.
El Minsa indicó que es difícil determinar o aseverar de qué manera se contagiaron estos detenidos.
Lo anterior, a pesar de que se realizan exámenes de laboratorios al ingreso y al egreso en el penal.
La cartera de Salud detalló que los afectados no tienen un sitio para permanecer alejados de los demás internos, empero, se mantienen las estrategias 90-90-90 para 2020.
Para este compromiso, la entidad indicó que se realizan charlas, pruebas de detección, capacitaciones e inclusive se cuenta con el apoyo de ‘grupos pares', integrados por personal de salud, custodios y los privados de libertad en algunos centros penales, que ayudan en el proceso.
El doctor Eric Ulloa, viceministro de Salud, expresó que en cuanto a la atención que se ofrece a los reclusos que están en el Centro Penitenciario La Joya y La Joyita ha sido un poco complicado a pesar de que se tiene los medicamentos antirretrovirales que son ofrecido por cinco médicos en la mañana y dos en la tarde.
El galeno aseguró que han mantenido reuniones con los directores y el Ministerio de Gobierno debido a la falta de comunicación ya que cuando se quiere trasladar un recluso a la clínica para ofrecerle la atención, éste tiene que estar acompañado de un agente de la Policía.
‘A muchos de los pacientes que tienen el VIH o tuberculosis, que se les hace el diagnóstico en la clínica, se les mantiene separados hasta que se reciben los tratamientos ', manifestó.
‘90-90-90'
Onusida recalca: Acabar con la epidemia de sida es más que un compromiso histórico con los 39 millones de personas que han muerto a causa de esta enfermedad. También representa una oportunidad de gran trascendencia con la que sentar las bases de un mundo más sano, justo y equitativo p ara las generaciones futuras.
15,400
varones y 895 mujeres están recluidos en las cárceles del país.