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Panamá

‘Hay albergues que no deberían de existir', María Inés Castillo

‘Hay albergues que no deberían de existir', María Inés Castillo

lunes 27 de diciembre de 2021 - 12:14 a.m.
Adelita Coriat
acoriat@laestrella.com.pa

Ministra del Mides, se refiere a los centros de cuidado nutricional y de temporada escolar

La ministra del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), está consciente de que tiene que cambiar el modelo de cuidado alternativo para niños que requieren protección, nutrición o viven en un albergue para poder asistir a la escuela. Un nuevo informe elaborado por la Red Latinoamericana de Acogimiento Familiar (Relaf) y la Unicef, hallaron grandes brechas entre lo que debería ser y lo que pasa en los albergues. Para iniciar, un niño no tiene por qué ser separado de su familia por pobreza, o porque la escuela está lejos de casa. El estado debe intervenir en esos casos, llevar la escuela al barrio y apoyar en la situación económica de las familias. Es hora de empezar una hoja de ruta que garantice un mejor trato para los niños en albergues y que ésta no sea la primera opción cuando se detecta un problema en casa. Sin embargo, ¿quién responde por lo actuado hasta el momento?

El informe de Relaf y Unicef confirma datos y otorga una hoja de ruta para la desinstitucionalización, sin embargo, cuando lee el documento se percata de un trato inhumano a más de mil niños. Esta situación desnuda a la Senniaf de la cual usted es presidenta de la junta directiva. ¿qué tiene que decir al respecto?

Este diagnóstico fue solicitado por el Ministerio de Desarrollo Social y nos confirma la situación denunciada por esta entidad al inicio de nuestra gestión y es por ello por lo que solicitamos este diagnóstico para lograr una hoja de ruta. En el tema de niñez nuestro país tiene una deuda histórica con los derechos de los niños, niñas y adolescentes, empezando con 30 años de no contar con un sistema de protección y de garantías para esta población. Esa vulneración de derechos inicia desde el hogar, desde la familia, en muchas ocasiones. Este estudio arrojó que el 39% de los niños que se encuentran en albergues entran por pobreza, son innecesarias. Tenemos albergues de protección, de temporada escolar, de nutrición, pero los segundos no deberían de existir tampoco. Pero debo insistir que cuando hablamos de este cambio sistémico, al que nos debemos de comprometer todos, es ver que los albergues no son la solución. Debemos apostar como país al fortalecimiento familiar. Es el principal derecho de los niños, crecer en familia. Esa familia nuclear que la tienen, porque sólo el 3% de los niños que están en los albergues es huérfana.

No creo que estos hallazgos pasen desapercibidos en la junta directiva que usted preside. Todos tienen una cuota de responsabilidad. ¿Qué van a hacer con quienes ocupan esos cargos?

Estamos hablando de corresponsabilidad en la sociedad en su conjunto e histórica. No solamente de trabajo articulado en la junta directiva de Senniaf, por eso este diagnóstico fue presentado ante el Consejo de Niñez y Adolescencia en el que participan actores como el Órgano Judicial, el Legislativo, el Ejecutivo y sociedad civil porque todos somos corresponsables en materia de derechos y la garantía de nuestros niños.

¿Qué medidas tomarán entonces?

Más es hacia dónde vamos.

Las personas que están ahí deben rendir cuentas…

Ha habido cambios durante muchos años y el cambio dentro de los albergues no se ha visto porque se trata de un tema sistémico, de fondo, de cambios que inician con que un niño debe tener una intervención única, que incluya a su familia, con un expediente automatizado que permita conocer todo sobre el niño. Todas las atenciones que requiere para poder trabajar con su familia.

Lo que no concibo es que las personas que están en esa junta directiva pasen agachadas… los hallazgos del informe son contundentes… ¿Habrá una investigación en Senniaf? ¿cambiarán los actores de la Junta Directiva?

La junta directiva de Senniaf y el Procurador de Administración que ve el tema administrativo, a raíz de las denuncias que presentamos, hizo una investigación y en ella se demuestra que se cumplieron con los procedimientos. Además, Senniaf tiene sus medidas administrativas e investigaciones que cumplir. Pero nosotros, no solamente con la hoja de ruta hacia el sistema de protección y de garantías hacia nuestros niños que es hacia donde tenemos que trabajar, en la Asamblea Nacional también se encuentra la ley de Acogimiento Familiar y la ley de Adopciones. Hay avances significativos en la materia. Cuando nosotros iniciamos en el Mides, al mes me tocó poner las denuncias en temas de subsidios porque las competencias son claras entre instituciones.

Un 30% de los casos que llegan al Ministerio Público son por violencia doméstica. Lo que anuncia otra complejidad en el fortalecimiento familiar, ¿cómo tratará este problema con el mismo personal?

Como sociedad los medios podrían ayudarnos mucho en la sensibilización en contra de la violencia y de fortalecer la familia, eso cambia. Con signos claros sí cambian y son actores importantes.

Sin embargo, ahí no descansa el problema, sino por la falta de guía del estado...

El fortalecimiento familiar, el trabajo comunitario, el trabajo desde el Plan Colmena con todos los actores institucionales que deben intervenir, todo se debe de descentralizar. Por ejemplo, un plan piloto que estamos ejecutando con Unicef en Panamá Oeste que tiene diagnósticos claros en el barrido, que evidencian que hay 400 niños que no están inscritos en el Registro Civil, no están identificados. Y así nos vamos, como país el cambio es grande, es sistémico y todos estamos claros que debemos involucrarnos.

¿Qué me garantiza que, en esta ocasión, después de 30 años, sí habrá un cambio?

Tenemos la voluntad, el compromiso, el diagnóstico y la hoja de ruta. Estamos sentando las bases para este cambio sistémico y la deuda social que tenemos con la niñez que inicia con la aprobación del sistema de protección integral de niños, niñas y adolescentes que es una deuda histórica. Por ahí estamos empezando.

¿Qué políticas públicas va a adoptar para la descentralización?

El sistema de protección baja hacia los municipios y corregimientos, y además de eso, en la ruta de atención integral a la primera infancia que es parte de la prevención, incluye la parte territorial. Desde el gobierno central eso no baja. Por ejemplo, hay que cambiar que en provincia sea fácil dejar a un niño en un albergue. Antes hay que trabajar con la familia, esa es la solución. Hay regionales mejor que otras, pero el compromiso de cambio inicia cuando identificamos una vulnerabilidad en una familia, cómo intervenir, como cambiarla, el apoyo psicológico y emocional, en medio de la pobreza buscar fortalecer a las familias. Eso se hace con los programas de transferencia monetaria condicionada.

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En el tema de niñez nuestro país tiene una deuda histórica con los derechos de los niños, niñas y adolescentes, empezando con 30 años de no contar con un sistema de protección'
 


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