Opinión
En tiempos medievales, cuando las procesiones católicas no podían llevarse a la calle -debido a la lluvia u otra razón
En tiempos medievales, cuando las procesiones católicas no podían llevarse a la calle -debido a la lluvia u otra razón-, se escenificaban dentro de los templos. Los celebrantes estaban tristes por las limitaciones, pero sonreían. Así nació la frase: ‘la procesión va por dentro', para referirse a una persona que celebra, aunque sufre. La frase bien puede aplicarse a ‘Naamán, jefe del ejército sirio, soldado valiente, de muchas victorias; pero enfermo de lepra'. Por fuera, era un hombre fuerte, exitoso, ‘de mucho prestigio (que) gozaba del favor de su rey'; pero por dentro, un débil general moría triste, dolorosa y lentamente. Después de mucho tira y jala, Eliseo le dijo: «ve y ZAMBÚLLETE siete veces en el río Jordán; así tu piel sanará, y quedarás limpio». Aunque el militar se negó, finalmente ‘se ZAMBULLÓ siete veces en el Jordán, conforme a la PALABRA del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio'. Ahora veamos: eres exitos@, ganador@... pero, ¿llevas una procesión por dentro?; lo tienes todo, pero la tristeza, amargura, soledad, ansiedad, la ira o el miedo te devoran, o simplemente sonríes, pero lloras, sufres, en fin: ¿llevas ‘la procesión va por dentro'? Entonces, es hora de que te ‘ZAMBULLAS' en la PALABRA y sanes. Es hora de que te ‘ZAMBULLAS' y te levantes. ¡‘ZAMBÚLLETE'!, para que seas ‘prosperado en todas las cosas'. ¡‘ZAMBÚLLETE' y vuelve a sonreír, a celebrar por dentro y por fuera!
2REYES 5:10 «Ve y ZAMBÚLLETE…»