Comparación entre elecciones de 1989 y 2024

Hace 35 años tres ciudadanos se jugaban la vida al enfrentarse a las amenazas y a las acciones criminales de Manuel Antonio Noriega y los fieles del Partido Revolucionario Democrático. Guillermo Endara Galimany, Ricardo Arias Calderón y Guillermo Ford firmaron un pacto de sangre para ir hasta el final. Nada de claudicar, ni mucho menos refugiarse en una embajada ante el comportamiento salvaje de quienes desgobernaban en esos momentos. Endara fue golpeado cuando defendía el voto en la plaza de Santa Ana.

Con un varillazo, en la parte frontal superior de la cabeza, cayó desmayado. Comenzó a botar mucha sangre y la herida era mortal. Arias Calderón fue víctima de un batazo en el medio de las piernas y Ford se enfrentó, de manera indefensa, a los chacales que vestían las camisetas de los batallones de la dignidad. ¡Qué diferencia de aquellos tiempos con las elecciones que acaban de ocurrir! Por lo anterior es que siempre afirmaremos que la peor democracia se imponte ante la mejor dictadura.

Esos tiempos de enajenamiento no los debemos olvidar. Hoy, cada uno sacará su lectura de cómo votó el pueblo. Lo cierto y real es que tenemos nuevo presidente de la república en la figura de José Raúl Mulino.

En todas las entrevistas que he escuchado, luego del triunfo, hay mensajes muy alentadores. Tal como lo dije en 2019, no voté por Laurentino Cortizo, pero tengo que aceptarlo como la persona que gobernará la nación y si lo hace bien contará con mi apoyo. Iguales expresiones le digo a Mulino. Como actor principal de aquellas elecciones de 1989 puedo asegurarles a mis seguidores que esos tiempos fueron difíciles.

Muchos arriesgamos la vida enfrentándonos a un general que había perdido la perspectiva de lo que significaba la vida y la muerte de sus compatriotas. Siento que no hemos sido justos con los tres candidatos que se jugaron la vida durante las elecciones de 1989.

Le envío un mensaje directo a Mulino... “¡Paisano, interceda para que honremos la memoria de estos tres jinetes que pese a la tempestad y a las amenazas supieron defender con la sangre el triunfo del 7 de mayo de 1989!” Propongo que la sede del Tribunal Electoral lleve el nombre de Guillermo Endara Galimany, considerado por muchos como el PADRE MODERNO DE LA DEMOCRACIA. Abrazos y que todos rememos hacia el Panamá decente, desarrollado y próspero. ¡Dios bendiga a esta nación que lo tiene todo para brillar con luz intensa en el universo!