Opinión
Al menos 7 niños nacen por hora en hospitales públicos y particulares de Panamá según cifras de Contraloría General de la República
Al menos 7 niños nacen por hora en hospitales públicos y particulares de Panamá según cifras de Contraloría General de la República.
Unos con ‘pan' debajo del brazo mientras que otros no, refiriéndose al sustento y circunstancias en que llegan a este mundo, pero con un denominador común: inocencia ávida de amor y cuidados. Por eso y más debemos velar como sociedad y país.
Para estos días en que las voces de protesta se escuchan ante denuncias y exigencia de investigación prolija con las debidas consecuencias, se reaviva el debate sobre pasado, presente y futuro de nuestra niñez que ha sido vulnerada, maltratada y cuyas aspiraciones se pierden en muchas preguntas sin respuestas.
Pero más triste aún, sin afecto ni confianza en sí mismos y mucho menos en su entorno.
El escenario es complejo y como tal debe ser evaluado. Estos lugares de atención de menores, calificados por un especialista como ‘mazmorras' deben experimentar real transformación con componentes físicos y emocionales sujetos a supervisión constante sin ‘shows mediáticos' para tranquilizar conciencias, apaciguar emociones.
Los profesionales para la atención debida existen. No son de Marte son de Panamá y están dispuestos a ayudar. Abran el compás para que entren en acción. El presupuesto asignado debe ser fiscalizado. Las auditorías deben ser parte del día a día y no coyunturales. Este tipo de medidas deben ser aplicadas a todas las instancias de cuidado del bien preciado de país: Nuestra niñez.
LA AUTORA ES PERIODISTA