Internacional
Más de un millar de nicaragüenses que permanecen varados en Panamá viven una situación de "tristeza e incertidumbre"
Más de un millar de nicaragüenses que permanecen varados en Panamá viven una situación de "tristeza e incertidumbre" como producto de su situación migratoria y de las condiciones en que se encuentran, denunció ayer lunes la no gubernamental Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH).
"Hay estrés, entre los nicaragüenses que permanecen hacinados en centros de albergue. Las autoridades panameñas se sienten más presionadas y, tienen razón, no es un problema de ellos", dijo el abogado de la CPDH, Pablo Cuevas, en conferencia de prensa.
Aunque un primer grupo de 89 nicaragüenses que estaban varados en Panamá ingresó a Nicaragua el fin de semana, el resto se encuentra en dos centros de albergue en Chiriquí, a la espera de que el Gobierno del presidente Daniel Ortega extienda un nuevo permiso de entrada, según Cuevas.
La restricción fundamental es que en Nicaragua únicamente, aceptarán el ingreso de 100 compatriotas cada tres días, y la otra, es que el Gobierno decide a quién deja entrar, según la CPDH.