Internacional
Por ser carnívoros, están a la cabeza de la cadena alimenticia y son considerados fundamentales para el equilibrio de los ecosistemas
Los fuertes incendios que azotan este año al Pantanal brasileño y que ya han destruido el 15 % de este ecosistema amenazan a cientos de especies que allí habitan. El jaguar, el mayor felino de América, es uno de ellos.
El Pantanal, el mayor humedal del planeta, y que es compartido con Bolivia y Paraguay, pero con el 56 % de su superficie en suelo brasileño, ha sido el ecosistema más afectado por las llamas este año en el gigante sudamericano.
Datos oficiales estiman que allí viven ocho jaguares por cada 10.000 hectáreas, por lo que es posible ver hasta 15 de estos animales en una semana, lo que hace del parque un apetecido centro turístico para observar a los felinos.
UNA ESPECIE VULNERABLE
Expertos de diversas organizaciones que promueven la conservación del jaguar señalaron a EFE que, a pesar de las destrezas de este animal -el tercer mayor felino del mundo después del tigre y el león y el más grande del continente americano-, las llamas lo están afectando fuertemente, ya sea por quemaduras directas o por la devastación de su hábitat.
Conocido científicamente como "panthera onca" y en Brasil como "onça pintada", el jaguar puede llegar a medir 1,80 metros de largo y alcanzar un peso de hasta 150 kilogramos, por lo que es considerado el más robusto de su especie, por encima del leopardo y el guepardo.
De acuerdo con la organización no gubernamental Procarnívoros, existen cerca de 87.000 jaguares en Brasil, la mayoría de los cuales en la Amazonía y en el Pantanal.
"Los jaguares adultos tienen una capacidad de desplazamiento más rápida, pero la intensidad del fuego es tan elevada que hasta ellos están siendo quemados", aseguró a EFE Ricardo Bulhosa, presidente de esta ONG.