Internacional
Además se comprometió a ayudarlo económicamente para que acabe sus estudios
La historia de Víctor Angulo Córdova, un niño peruano que fue captado realizando sus tareas escolares en la calle en altas horas de la noche y bajo la tenue luz de un poste de alumbrado público, llamó la atención de un empresario árabe, quien viajó hasta Perú para conocer la historia del pequeño que cursa el sexto grado.
Esta historia se viralizó rápidamente y conmovió a la comunidad internacional, sin sacar a Yaqoob Yusuf Ahmed Mubarak, multimillonario del Reino de Bahrein.
Ahmed Mubarak contactó a su abogado mexicano, Gilberto Rosas Landa Zamora, a quien le pidió que encontrara al pequeño. Finalmente pudo contactarse con la institución educativa Ramiro Ñique de Moche, lugar donde estudiaba Víctor.
Dijo que se interesó por Víctor, porque nunca en su posición hubiera estudiado en la calle. "Creanme, nunca", dijo entre risas.
Después de contactar con él, el empresario viajó 14 mil kilómetros para conocer al pequeño quien vive en la norteña ciudad de Trujillo.
El millonario, a su primer encuentro con Víctor le entregó a sus manos dos mil dólares, le ofreció construir una casa de dos pisos y darle un negocio a su madre.
El empresario prometió arreglar el colegio, que - dicho por el propio pequeño- se cae en pedazos, e implementar una nueva sala de cómputo en el colegio del niño. Pero hay trabas para que la donación se dé, debido a la burocracia.