Creatividad
Puedes poner en los pies de tu pareja un poco de chocolate, nata, mermelada o lo que se te ocurra.
Curiosidades
Esta parte del cuerpo puede despertar más interés que otras zonas convencionalmente excitantes
Son muchas las personas que sienten este deseo sexual por los pies. Se trata de una devoción por esta parte del cuerpo que puede despertar más interés que otras zonas convencionalmente excitantes.
Existen muchas maneras de besar los pies de una mujer, sin embargo, antes de entrar en el terreno de los besos, es importante que prepares a tu pareja sexual con un ritual de excitación que os pondrá a los dos a tono. Por ejemplo, puedes empezar agachándote y quitándole los zapatos con lentitud y suavidad; puedes besar el zapato y oler el rastro del pie.
Una vez estén los pies desnudos, pon un poco de aceite comestible sobre toda la zona, haciendo un suave y excitante masaje. Debes saber que, desde la planta de los pies se pueden acceder a distintos puntos erógenos del cuerpo, esta técnica es conocida como reflexología podal y es perfecta para excitar a tu pareja masajeando los pies.
A continuación, ya puedes entrar en materia y comenzar a besar los pies. Para ello, es importante que primero empieces de una manera suave, dando "piquitos" en toda la zona, restregándote el pie por la cara para percibir la textura y el olor que ahora tiene. Ten en cuenta que, gracias al aceite que hemos aplicado, el pie estará suave y liso.
Cuando ya hayas rastreado toda la zona, puedes empezar a besarlos de una manera más pasional: saca la lengua, recorre cada parte del pie y empieza a tocarte. Verás cómo la excitación se hace dueña de la habitación y tu pareja se contagia de esta emoción. Invítala a ella que también se toque y, así, los dos podréis disfrutar de este intenso momento.
Otra manera en la que puedes besar los pies y que seguro que os pondrá a cien a los dos, es chupando los dedos de los pies; es decir, no basta sólo con lamerlos sino que la idea es que te los metas en la boca, los beses con la lengua y les des suaves mordiscos que los excite mutuamente.
Creatividad
Puedes poner en los pies de tu pareja un poco de chocolate, nata, mermelada o lo que se te ocurra.