Carretilla
Es fácil de llevar a cabo siempre y cuando la mujer sea un poco flexible y el hombre tenga fuerza en los brazos.
Curiosidades
A la hora de practicar sexo, hay una gran cantidad de posturas que puedes probar para conseguir que la actividad sexual sea divertida
A la hora de practicar sexo, hay una gran cantidad de posturas que puedes probar para conseguir que la actividad sexual sea divertida y nada monótona. El libro estrella sobre esta temática es el manual hindú del Kamasutra y, en él, se nos muestran desde sencillas posturas sexuales a otras que son más acrobáticas y aptas para los amantes más expertos. Además de hacer sexo de maneras tradicionales, se pueden practicar otras posiciones que son muy placenteras y eróticas.
Te detallamos las posturas para tener sexo de espaldas, una manera en la que los amantes no se ven las caras pero disfrutan de la parte trasera de su pareja.
Pasos a seguir
1- La sorpresa. Esta postura sexual de espaldas es perfecta para disfrutar de un sexo más salvaje y erótico. Se trata de una práctica sencilla donde la mujer tiene que hacer gala de su flexibilidad pues el truco consiste en que ella se doble lo máximo que pueda para que el hombre la penetre desde la espalda. Con esta pose, el hombre tiene las manos libres para estimular el cuerpo de ella y disfrutar de un sexo más apasionado.
2- El sometido. En esta pose, es la mujer quien marcará el ritmo y quien "someterá" al hombre. Él deberá tumbarse completamente en una superficie llana y ella se sentará encima de él pero dándole la espalda. Con las piernas flexionadas en un ángulo de 90 grados, ella podrá ir marcando el ritmo y moverse como más placer le dé. La posición en la que está la mujer es perfecta para poder estimular los testículos del hombre y él también tendrá las manos libres para poder disfrutar del cuerpo de su amante.
3- Aspas de molino. Esta postura ya es un poco más complicada y requiere de una técnica más avanzada en las artes amatorias. La mujer deberá tumbarse encima de una superficie lisa y abrir las piernas; el hombre se pondrá completamente al revés de cómo está la mujer e introducirá el pene en la vagina de ella.
Para poder mantener el equilibrio y que él no se canse demasiado, lo mejor es que sea ella quien marque el ritmo apoyando las piernas en la espalda del hombre. Subiendo el trasero podrá facilitar la penetración sin que él acabe exhausto.
Carretilla
Es fácil de llevar a cabo siempre y cuando la mujer sea un poco flexible y el hombre tenga fuerza en los brazos.