Una lubricación inadecuada puede generar molestias.
Curiosidades
Recuerda que los juegos previos son fundamentale
SENSUALIDAD
¿Buscas nuevas posiciones para aumentar la intensidad de tus encuentros sexuales? La postura del abrazo total es una posición que permite disfrutar del contacto absoluto entre ambos miembros de la pareja. Es perfecta para practicarla en cualquier lugar ya que se realiza de pie, resultando idónea para utilizarla en probadores, dentro de la ducha, o cualquier otro lugar que se te ocurra -la imaginación nunca debe faltar en tus encuentros.
Te adelantamos que una de las principales ventajas que ofrece es una penetración profunda y la posibilidad de intercalar movimientos suaves con otros más bruscos, y combinar un ritmo más lento con otro más acelerado. ¿Te animas? En este artículo te revelamos las claves para llevar a cabo la postura del abrazo total.
Cómo se hace
Estoy segura de que aunque aún no sepas de qué posición estamos hablando, ya tienes ganas de probarla, y aún tendrás más cuando sepas lo fácil que es ejecutarla.
En primer lugar, el hombre debe sujetar con sus brazos a la mujer por los glúteos y acercarla hacia su pubis. Por su lado, la mujer debe rodear al hombre con sus brazos y sujetarse con sus piernas a la espalda baja o el trasero del hombre para no deslizarse hacia abajo en exceso.
Una vez se ha adquirido esta postura inicial, el hombre puede apoyar la espalda de la mujer contra la pared para poder controlar mejor sus movimientos y ganar equilibrio.
La ventaja de esta postura es que ambos miembros de la pareja se encuentran cara a cara, por lo que pueden mirarse, besarse en la boca, cuello, hombros, etc. Además, la mujer tiene sus manos libres por lo que puede agarrar el pelo del hombre, tocarle la espalda o incluso estimularse los senos a sí misma.
La postura del abrazo total es idónea para que el hombre controle el ritmo de la penetración, por lo que puede decidir si quiere penetrar rápidamente, o aminorar el ritmo y realizar profundas penetraciones lentamente, sintiendo el roce al máximo.
Además, esta postura otorga un contacto directo del clítoris de la mujer con el pubis del hombre, por lo que realizando los movimientos adecuados estimularemos este pequeño órgano del placer hasta alcanzar el orgasmo.
Buena forma física
En función de la fuerza que tenga el hombre y el peso de la mujer, es posible que esta postura resulte incómoda al requerir resistencia no solo física, sino también muscular por parte del hombre. Sin embargo, apoyar la espalda de la mujer sobre la pared es una buena forma de disminuir el peso. De todas formas, te recomendamos estos ejercicios para ser mejor en la cama.
Una lubricación inadecuada puede generar molestias.