Calma
Además de no alejar a esa persona, conseguirás desahogarte y encontrarte mucho mejor.
Curiosidades
Debido a ello, la tensión entre ambos va creciendo de manera progresiva hasta que el choque de personalidad explota
Un motivo por el que tu pareja te irrita constantemente puede ser por que ambos tengan un carácter bastante dominante. Este tipo de personalidades tan fuertes y parecidas pueden provocar que, poco a poco, se vaya formando como una especie de "lucha de poderes" entre tú y tu pareja.
Debido a ello, la tensión entre ambos va creciendo de manera progresiva hasta que el choque de personalidad explota y ya se da una situación en la que frecuentemente tienen discusiones de pareja porque cada uno piensa que lleva la razón y el otro se equivoca hasta a la hora de escoger un producto u otro, por ejemplo.
En este tipo de situaciones, tanto él/ella como tú deberías aprender a escuchar y acercar sus posturas, ya que de lo contrario, seguramente la relación terminará rota por su propio ego.
Comienza por detectar cuál es la verdadera razón por la que se ha producido la discusión para llegar al fondo del asunto sin dar vueltas u ofender a tu pareja. Por ejemplo si la discusión se inicia porque él nuevamente olvidó llamar para decir que no venía a comer, lo que te genera molestia no es el acto en sí sino lo que puede haber detrás: que tu pareja es desconsiderada, que sientes que no te toma en cuenta etc. Detectar el centro del problema es primordial para hacer la discusión más breve y no acabar a los gritos
Siempre escucha a tu pareja cuando defiende sus razones, óyela sin perder la calma y sin irrespetar. No se trata de una lucha de poderes, ni de comprobar que "yo soy mejor porque tengo la razón", es un diálogo para llegar a una conclusión y mejorar las cosas, no olvides que todos tenemos defectos y que "ser perfecto" no existe.
Si al escuchar a tu pareja consideras que tiene la razón en algunos aspectos, entonces ten la nobleza de admitirlo y pedir disculpas. El orgullo no es positivo en una unión y admitir que nos hemos equivocado puede hacer que una discusión acabe en minutos, mantenernos firmes de forma testaruda solo aumentará el malestar y los llevará a perder el control
Calma
Además de no alejar a esa persona, conseguirás desahogarte y encontrarte mucho mejor.