Crónica roja
Fuentes indican que el hombre pudo ser asesinado dentro de una casa y tirado en la calle
FATALIDAD
La muerte de Víctor González, un muchacho de 32 años, oriundo de Toro Bravo de La Pintada, Coclé , inicialmente se pensó que fue un atropello y fuga; sin embargo, ha resultado ser un presunto homicidio, con indicios pasionales.
No ocurrió tal atropello esa madrugada del martes 27 de septiembre en la vía principal de La Candelaria de Río Grande, en Penonomé, según se desprende de las sospechas o hipótesis que se han esparcido por el pueblo y que todas convergen en el mismo final: un crimen.
Muerte en el área
Víctor, fue asesinado dentro de una residencia cercana al sitio donde dejó su auto con dos acompañantes dentro. Todos estuvieron de parranda horas antes, lo que explica el hallazgo de su cadáver con solo la ropa interior, tirado en la carretera, para que simulara un atropello o aplastamiento.
Una foto de su cuerpo, tomada por curiosos del hecho, circuló notablemente en las redes sociales y la conclusión generalizada, es que su anatomía no revelaba heridas propias de un accidente por atropello.
El charco de sangre coagulada bajo su cabeza boca arriba denotaba una herida de connotación mortal.
Con arma blanca
Se menciona que se le propinó una herida cortante en el cuello, incluso un golpe contundente antes, supuestamente.
Otros elementos recabados por parte de allegados a la víctima son que su vestimenta con la cartera estaba a cierta distancia del cadáver –en la orilla de la calle–, pero su celular no apareció, ni siquiera en el carro donde un primo y un amigo se quedaron dormidos, sin que se dieran cuenta de lo ocurrido con su compañero ese día fatídico.
El hermetismo que el Ministerio Público mantiene en torno a este caso y otros de dudosa claridad ha impedido que la comunidad confirme lo que ya se conoce a vox populi .
¿Pasional?
Según versiones de algunas fuentes judiciales una presunta vieja relación sentimental arriesgada de Víctor lo pudo llevar a la muerte y quizás un concubino herido en su dignidad varonil, probablemente esperó la ocasión para tomar la ley en sus manos y vengar su honor.
También se rumora que el posible victimario, hace dos semanas, se entregó, mas es el fiscal a cargo del caso quien debe aclarar si el posible homicida debe confesar el hecho criminal. Presuntamente puede estar involucrado también un hermano como participante del acto.
Hasta el celular de Víctor, podría haber aparecido en poder de los victimarios.
Sordos y mudos
Las especulaciones de los detalles por el confeso, ya corren de voz en voz. Algo inevitable, dada la ausencia de una declaración oficial de parte del Ministerio Público.
Los familiares de Víctor González han evitado contacto con los medios, por la connotación del lamentable desenlace de ese día, que se perfilaba de diversión para Víctor, Senil y Juan Pablo, quienes decidieron como en otros momentos, salir y pasarla alegres. Hoy, sigue abierta la investigación.
7 días libres tenía Víctor, pero solo gozó uno antes de fallecer
32 años, edad de Víctor González, oriundo de La Pintada